Llegamos a la isla de Cat Ba, en el golfo de Lan Ha, con una embarcación desde la bahía de Halong. Es un lugar fascinante y mucho menos frecuentado que su vecina bahía de Halong. Buena parte de la isla es parque nacional y posee variados ecosistemas y fauna. En ella se encuentra el langur de cabeza dorada, un primate en peligro de extinción. Nosotros empezamos a explorar la isla con una ruta de 8 km hasta una de las cimas de la montaña. La ruta no es fácil, especialmente ese dia porque estaba todo mojado por la lluvia de la noche anterior, pero las vistas desde la cima son alucinantes! Todo lo que nos envolvía eran picos verdes llenos de jungla y con un arsenal de mamíferos y aves, como ardillas, jabalíes, macacos, halcones, etc. También hay otras rutas mas cortas y fáciles para llegar a las cimas!
Por la tarde nos dirigimos a una de las decenas de islas casi vírgenes que forman la bahía de Lan Ha, al sureste de la isla de Cat Ba, que es muy parecida a su vecina pero con playas de arena blanca. Algunas de ellas ya tienen resorts en los que puedes pernoctar. Nosotros fuimos a la que llaman la Monkey Island. Allí no nos bañamos, ya que el día era más bien frío y no apetecía mucho meterse en el agua, pero puedes nadar y practicar un poco de snorkel. Caminamos un poco por la isla, subiendo por un peñón para tener una mejor perspectiva de la inspiradora cala y luego nos dedicamos a observar a los pequeños primates que invaden el islote. Cuidado con ellos porque si tienes comida o bebida vendrán a por ti!!
De vuelta a la isla pasamos por un pueblo flotante, cerca de Cat Ba. Creo que deve ser bastante duro vivir en esas condiciones, sin agua potable y con dudosas condiciones de salubridad. En fin, cada uno vive y se adapta con lo que tiene a su abasto!
Esa noche la pasamos en la capital de la isla, que lleva su mismo nombre. Aunque hay mucho ambiente turístico, la ciudad no tiene demasiado encanto y ademas los hoteles de hormigón empiezan a crecer como setas. En la isla hay otros pueblos de pescadores que se mantienen fieles a su forma de vida, que no es otra que la que les brinda la mar!
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